Como bufete de abogados matrimonialistas en Pinto queremos ahondar en este nuevo post en las diferencias, desde el punto de vista legal, entre una separación y un divorcio.

Lo primero a tener claro es que una separación implica el cese efectivo de la convivencia de los cónyuges. A ojos de la ley, supone un cambio con consecuencias tanto patrimoniales como personales. Para que una separación tenga efectividad legal hay que hacerla constar en una sentencia judicial. En el despacho de Elena López Rodríguez te recordamos que este requisito no se aplica en las separaciones de hecho. En estos casos se produce un cese de la convivencia, pero sin efectos legales que haya que hacer constar en el Registro Civil.

Al contrario de lo que ocurre con el divorcio, una separación no disuelve el matrimonio. El divorcio sí que implica la disolución del régimen económico matrimonial. Tras tramitarlo, los cónyuges se pueden volver a casar entre sí o con otras personas. No ocurre lo mismo tras una separación ya que, a ojos de la ley, las personas siguen casadas. En nuestro despacho de abogados matrimonialistas en Pinto te insistimos en que tanto el divorcio como la separación legal impiden que el otro cónyuge herede abintestato. Hablamos de la forma de heredar cuando el fallecido no ha hecho testamento. Si hay hijos menores de por medio, tanto en caso de divorcio como de separación, la sentencia ha de incluir el régimen referente a su manutención y todo lo relativo a la custodia y el régimen de visitas.